¿Para qué se preparó Quintero?
El alcalde de Medellín alardea del manejo que le ha dado a la pandemia en la segunda ciudad más importante de Colombia. Dice Quintero que desde enero se preparó para enfrentar el COVID-19, pero la pregunta es: ¿Para qué se preparó?
Si se preparó para tener más camas hospitalarias disponibles lo hizo mal. Habló de una clínica solo para pacientes COVID-19 que todavía no existe, hizo el correspondiente show mediático con el Hospital de la 80 y aún no está listo, ni lo estará.
Si se preparó para monitorear el virus con Big Data e Inteligencia Artificial también lo hizo mal. No sólo recopiló datos personales a diestra y siniestra sin que sepamos de un uso funcional, sino que ese millonario contrato no ha logrado brindar información que pueda facilitar las decisiones del gobierno local. Lo cierto es que hoy el mapa de Medellín está en ‘rojo’.
Si Quintero se preparó para que cientos de miles de medellinenses no pasaran necesidades durante el confinamiento, también lo hizo mal. Adjudicó millonarios contratos a amigos; el dinero de la ‘donatón’ no se sabe dónde está, y lo que es cierto es que no solo los trapos rojos abundan en las comunas más pobres de la ciudad sino en esas zonas, por necesidad y ante la negligencia del gobierno de Quintero, la gente está en las calles.
Si se preparó para educar a la ciudadanía del autocuidado también falló porque las medidas restrictivas como el bloqueo de la tarjeta cívica, la improvisación con el pico y cédula, los abusos policiales diarios, y las restricciones los fines de semana no es pedagogía que los medellinenses hayan aceptado ni entendido mientras él se reúne con sus funcionarios a ritmo de Arelys Henao.
Y ni hablar de la «oportuna» petición de traer los médicos más rechazados del mundo por su ineptitud, que solo son llamados allí donde quieren financiar el régimen cubano.
Quintero vendió el discurso de prepararse para la pandemia y retrasar el pico de la curva para tener todo listo, pero hoy las cifras, que tienen nombre y apellido, demuestran lo contrario. No hay camas UCI disponibles, pronto se acabará el oxígeno medicinal en la ciudad, varios de sus funcionarios y hasta él se contagiaron de coronavirus, no hay personal médico y la indisciplina social es el pan de cada día porque no llegan las tan vociferadas ayudas.
Mal Quintero, a la alcaldía no se llegó a aprender, se llegó a gestionar y solucionar a tiempo.