Un salto al vacío de liberalismo
El exsenador Mauricio Jaramillo decidió irse contra su hermano el alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo, en el tema de su sucesor. El alcalde aunque no puede participar expresamente había decidido desde hace varios meses apoyar a su antiguo exgerente de Ibal, Alberto Girón, quien más bien se caracteriza como independiente.
Pero en los últimos días la disciplina de partido y los compromisos con el expresidente César Gaviria han podido más que los lazos familiares. Ahora Maurició Jaramillo ha decidido irse con un candidato liberal de menos peso pero además buscando una consulta interpartidista. Pero qué hay detrás de este aparente capricho del hermano del alcalde de Ibagué que le puede costar miles de millones al Estado? Acaso el máximo dirigente del Partido Liberal en el Tolima, el exsenador Mauricio Jaramillo Martínez, hijo de la legendaria dirigente HIlda Martínez de Jaramillo está dispuesto a dejar de lado y mal parado a su hermano el alcalde de Ibagué, Guillermo Alfonso Jaramillo? Por qué insiste en derrochar miles de millones de las arcas del Estado para satisfacer un capricho de poder.
Jaramillo está empecinado en hacer una consulta interpartidista para definir un candidato único entre el Partido Liberal, Cambio Radical, Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS) y el Partido Alianza Verde. Esto además parece un dictado de la oposición al presidente Iván Duque y ya se ven extrañas alianzas a nivel regional entre Germán Vargas Lleras y Gaviria.
Sin embargo, nadie entiende el sentido de esta onerosa consulta, ya que los otros tres partidos -fuera del Liberal- se muestran en desacuerdo hasta con medirse en una encuesta, y tantos los jefes regionales como los precandidatos comparten el deseo de irse cada uno por aparte. Incluso de hacer una coalición, sin necesidad de hacerle gastar semejante millonada al Estado colombiano para hacer una consulta improductiva.
La intención del hermano del alcalde Guillermo Alfonso -quien hasta ahora no estaría interesado en la consulta, dado que apoya al candidato del MAIS- pareciera ser revivir las otroras épocas del glorioso Partido Liberal en Ibagué, que comenzaron a esfumarse cuando esta colectividad quedó a su cargo y, gracias a su apoyo, por ejemplo, llegaron al poder personajes lúgubres muy cercanos a su entorno, como el exalcalde Luis H. Rodríguez y el abogado Orlando Arciniegas, quienes hoy están en la cárcel por orquestar el desfalco de más de $37.000 millones destinados para la construcción de los escenarios deportivos para los Juegos Nacionales 2015.
Para tratar de borrar ese oscuro pasado y dar una desesperada muestra de poder, Jaramillo hoy intenta revivir su partido a costa de un claro detrimento del erario público, intentando sacar a flote a un candidato prefabricado y casi tan débil como la colectividad a la que improvisadamente representa.
Así las cosas, el capricho de Jaramillo está ad portas de volver a desatar la indignación nacional en contra del Partido Liberal, ya que los colombianos todavía recuerdan con molestia cómo los ‘rojos’ hicieron gastar al Estado $40.000 millones en una consulta innecesaria entre Humberto de la Calle y Juan Fernando Cristo, para definir el candidato de la colectividad a la elección presidencial de 2018.
¿Será que César Gaviria, presidente del Partido Liberal, estará dispuesto a pagar, nuevamente, el alto costo en imagen que tendría a nivel nacional, y pleno año electoral, otro escándalo de semejante magnitud, esta vez por cuenta del capricho de un dirigente regional que pareciera estar de salida, como Mauricio Jaramillo Martínez?