La Federación Española a la Colombiana, un océano de diferencias
A menos de dos días de iniciar la Copa Mundial de la Fifa, el evento deportivo más importante del planeta, la Real Federación Española de Futbol destituyó al técnico de su seleccionado Julen Lopetegui, porque este habría concretado su vinculación al Real Madrid posterior a este certamen. La razón de tan contundente y arriesgada decisión se habría dado por los posibles intereses encontrados que pudiera tener el entrenador con relación a los de su nuevo club a la hora de armar la nómina inicialista de cada partido.
Si bien la decisión es polémica y dura, también muestra claramente la seriedad y determinación de la Real Federación por hacer lo correcto, algo muy distinto a lo que sucede por ejemplo en Colombia, donde el entrenador José Néstor Pékerman y su cuestionado asesor y mano derecha, Pascual Lezcano, arman cada convocatoria con calculadora en mano para poder beneficiar jugadores sin perfil internacional pero que cuentan con empresarios hábiles en el medio que pagan por esas “promociones”. Y lo más absurdo de todo es que es justamente Lezcano uno de esos empresarios de jugadores que con gran frecuencia por no decir que casi siempre, convoca a sus representados al combinado patrio.
Pékerman hace convocatorias absurdas, desequilibradas, sospechosas, deja por fuera a jugadores en gran nivel, que han sido decisivos en momentos trascendentales y nadie dice nada, la Federación cómplice se hace la de la vista gorda y permite que evidentes hechos de corrupción y donde hay claros conflictos de intereses sucedan en sus narices. La diferencia entre nuestro seleccionado y otros como el español, empieza por el carácter y la honestidad de los directivos que allá se vio reflejada en una de las decisiones más difíciles, polémicas y arriesgadas pero al tiempo honestas y decentes.
Por: Andy Montero